El co-lecho vine a conocerlo hace poco, no tenía idea
que se trataba de compartir el lecho con el bebé, dicen que estudios aseguran
que “co-lechar” afianza el apego del bebé y le da un ambiente de seguridad.
A mi parecer es algo hermoso, pero no lo practico, la razón
es simple, después de salir de maternidad, el primer día en la casa me hacen
dormir con mi hija, estaba tan cansada por la falta de comida, la cesárea, los
remedios y las emociones, que me dormí profundamente, al cabo de unos 15
minutos escuche a lo lejos un pequeño murmullo, a medida que me iba despertando
me di cuenta que era más bien un leve quejido. Al mirar a mí alrededor buscando
a mi hija me di cuenta con horror que le estaba aplastando una piernecita y
ella estaba ahí toda envuelta quejándose suavecito. Fue tan impactante ese
pequeño accidente, que ese mismo día la lleve a su cuna.
Pasamos las tres primeras semanas durmiendo al lado de
su cuna en una silla, turnándonos para darle su leche, a pesar del cansancio encontré
que era mejor así. Pasó el tiempo, ya tenía ella su horario de dormir y
escuchaba y leía más seguido lo del co-lecho. Algunas amigas y conocidas mías defendían
con fiereza el co-lecho, que era algo natural y que hasta los animales lo
practicaban y nosotros debíamos imitarlos. Incluso algunas aseguraban que no
practicarlo hacia que los bebes fueran más nerviosos y ansiosos, además de no
conciliar bien el sueño.
Bien pues desde
aquí les digo que mi hija duerme toda la noche en su cuarto sola, sin
despertarse, ni sobresaltarse, en el día está llena de energía y siempre
amanece de buen ánimo. Solamente cuando estuvo con gripe, le armamos un
corralito en nuestro cuarto y durmió con nosotros, ya que tratamos de hacerla
dormir en nuestra cama y es una verdadera loquita para dormir, se mueve de aquí
a allá, se hace bolita, se estira, al parecer no le basta tantos juegos en el día.
Después de que se despierta en las mañanas, le doy su leche y compartimos en mi
cama dos horas a lo máximo y de ahí empezamos el día con toda la energía de una
pequeña de 10 meses y una madre positiva. J
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